La Paz, Bolivia.- Evo Morales anunció el domingo su renuncia a la Presidencia de Bolivia, luego de intensas protestas contra su polémica reelección a un cuarto mandato que se prolongaron por tres semanas, y tras perder el apoyo de las Fuerzas Armadas y la Policía.
“Estoy renunciando, justamente para que mis hermanas y hermanos dirigentes, autoridades del movimiento socialismo no sean hostigados, perseguidos, amenazados”, dijo Evo en un video televisivo.
El vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, también dimitió.
Tras el anuncio, la oposición se volcó a las calles para celebrar, y grupos en protestas saquearon la residencia del ahora expresidente boliviano. Además quemaron viviendas de dirigentes del gobierno de Morales
Las acusaciones de fraude por parte de la oposición sumió a Bolivia en una crisis nunca vista en ese país. Esta situación se agudizó con el informe de la auditoria realizada por la Organización de Estados Americanos -OEA- que obligó a Evo a convocar a nuevas elecciones.
Sin embargo, ya todo estaba escrito. A pocas horas de la convocatoria, Evo perdió el apoyo de las Fuerzas Armadas y de la Policia, que al igual que miles de personas, exigiieron su renuncia.
Cuba, Venezuela y el presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, condenaron los hechos, que calificaron de “golpe de Estado”